La gestión logística en entornos fríos es un desafío crucial para diversas industrias, desde la alimentaria hasta la farmacéutica. En este artículo, exploraremos a fondo los elementos esenciales de la logística refrigerada y proporcionaremos consejos prácticos para optimizar este proceso fundamental en almacenes fríos.
La logística refrigerada abarca una serie de elementos esenciales que van más allá del simple almacenamiento en lugares fríos. Desde el almacén frío, refrigerado por sistemas como cámaras frigoríficas o congeladores, hasta el transporte controlado y las actividades necesarias para mantener productos específicos a la temperatura adecuada, cada aspecto de la cadena logística debe adaptarse a las necesidades de conservación.
Dependiendo de la duración requerida para mantener un producto en almacenamiento, existen dos sistemas principales:
- Congelación: Se utiliza para conservación a largo plazo, con temperaturas inferiores a 0º C, incluso alcanzando -20º C o -30º C.
- Refrigeración: Este método a corto plazo establece temperaturas superiores a 0º C e inferiores a 10º C.
El desafío radica en mantener la temperatura dentro de la horquilla específica para cada producto, ya que más frío no siempre es mejor. Por ejemplo, el chocolate, que requiere mantenerse a 16º C, presenta un reto particular en la cadena de frío.
En la gestión de productos, se clasifican en cinco grandes gamas de temperatura negativa para su mantenimiento:
- De 0 a -4º C
- De -4 a -8º C
- De -8 a -12º C
- -20º C, para productos congelados
- -30º C, para productos helados
Con el aumento de productos que requieren temperaturas controladas, el transporte se convierte en una fase crítica. Diferentes modos de transporte se adaptan a esta necesidad:
- Avión: Rápido y eficaz, con centros de control de temperatura en aeropuertos para productos perecederos.
- Barco: Buques frigoríficos y contenedores refrigerados permiten el transporte preciso por vía acuática.
- Camión (transporte por carretera): Contenedores frigoríficos o refrigerados en camiones son el modelo actual para transportar productos a la temperatura adecuada.
- Ferrocarril: Uso de contenedores frigoríficos en plataformas ferroviarias con equipos autónomos que suministran electricidad.
La intermodalidad, donde los contenedores refrigerados son transportados en varios medios, es un sistema clave en la cadena de frío.
GESTIÓN EFICAZ EN ENTORNOS REFRIGERADOS
La correcta gestión logística en entornos fríos es crucial para evitar consecuencias negativas. Errores en la cadena de trabajo pueden tener repercusiones más graves cuando se trata de productos perecederos. Un ejemplo cercano es la distribución de vacunas contra la COVID-19, que requieren condiciones de temperatura específicas.
La eficiencia energética en almacenes y puntos de venta, junto con un control continuo de la temperatura, son fundamentales. La inversión en soluciones modernas, como monitores, controladores de frío y etiquetas inteligentes, puede marcar la diferencia en la conservación de productos sensibles.
CONDICIONES DE TRABAJO DE LOS OPERARIOS
La legislación en España establece límites de tiempo para trabajar en un almacén frío. Los operarios deben recibir formación y equipamiento adecuado, incluyendo cabinas calefactadas para condiciones extremas de hasta -30º C.
CARRETILLAS ADAPTADAS Y BATERÍAS DE LITIO
La elección de carretillas elevadoras adaptadas a entornos fríos es vital. Las carretillas Toyota ofrecen soluciones con acero inoxidable, aceite para cámaras frigoríficas, plataformas antideslizantes y baterías de litio que mantienen su rendimiento incluso en condiciones extremas.
ALMACENAMIENTO DE ALTA DENSIDAD
Optar por soluciones de almacenamiento compactas y eficientes es esencial en almacenes fríos. Las estanterías de pasillo estrecho aumentan el uso del espacio en aproximadamente un 30%, siendo una opción destacada.
AUTOMATIZACIÓN Y ROBOTIZACIÓN EN LA LOGÍSTICA DEL FRÍO
La automatización se vuelve cada vez más crucial en la logística refrigerada. Desde carretillas automatizadas hasta sistemas de almacenamiento semi-automatizados, la tecnología mejora la eficiencia operativa. La robotización también se vislumbra como un paso hacia almacenes automáticos, permitiendo la manipulación de productos en cámaras frigoríficas sin la intervención directa de operarios.
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
En resumen, la optimización de la logística en almacenes fríos requiere un enfoque integral. Desde la conservación adecuada de productos hasta el transporte controlado y la implementación de tecnologías avanzadas, cada aspecto de la cadena de frío juega un papel crucial. La inversión en soluciones adaptadas y eficientes, como las ofrecidas por Carretillas Elevadoras de Canarias, marca la diferencia en la eficiencia y rentabilidad de la cadena logística del frío. Si su empresa opera en este entorno, considerar estas recomendaciones puede ser clave para alcanzar el máximo rendimiento y asegurar la calidad de los productos almacenados.